En vista de que el sábado hizo bastante calor y la previsión para el domingo era de que aún hiciese más, Marino y el que suscribe decidimos dormir el sábado en Hoyos del Espino, para empezar a subir pronto sin tener que darnos tanto madrugón.
Desde el pueblo se ve que aún queda mucha nieve, cena de rigor para coger energías, iban a hacer buena falta:
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A primera hora las cabras son las dueñas y señoras, tanto en la subida a la Plataforma como más arriba:
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Y eso, que a horas tan tempraneras apenas hay público en la zona:
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Los esquíes pasan de la mochila a su elemento natural, y al lío. Ramón viene en el día, en modo turbo, nos coge en la primera subida:
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Lo dicho, mucha nieve aún por aquí arriba:
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Pieles fuera y a por la primera bajada, por la Majada Adrián:
Tenemos que quitar los esquíes varias veces, llegando a la laguna, antes de seguir foqueando hacia la Portilla de los Machos, hace una semana lo pudieron pasar del tirón. El panorama es espectacular:
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Pues nada, a por el segundo objetivo del día, la Portilla de los Machos. En la subida la nieve ya empieza a estar muy blanda, vamos resbalando continuamente, Marino y yo decidimos quedarnos sobre la mitad, a unos 2.200m, y bajar desde ahí, Ramón continúa hasta el final, el último tramo con los esquíes en la mochila:
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Hacemos tiempo en la laguna, comiendo algo, en lo que Ramón termina de subir y nos coge en la vuelta hacia la majada Adrián. Aquí ya se nota el calor y la pendiente, que han provocado unas cuantas purgas:
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Una vez en el collado seguimos subiendo hacia el Morezón, Marino y yo decidimos volver por donde hemos calzado los esquíes en la subida, Ramón sube un poco más, para bajar una de las canales laterales y salir por el desagüe:
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El video del día:
Pese a que ya era tarde, encontramos un sitio que nos dio de comer estupendamente, que teníamos más hambre que los lobos esteparios:
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