Después de meses de interrupción istrativa, la esperada reanudación de la licitación para la actualización del proyecto del tramo de la autovía A-21 que une Puente La Reina de Jaca con el límite de la provincia de Zaragoza (cruce de Fago) ha recibido luz verde. Esta sección es crucial para completar esta arteria que permitirá llegar directamente desde Pamplona a las estaciones de esquí de Astún y Candanchú por una vía de doble carril. El proceso había quedado en suspenso debido a errores detectados en la documentación técnica de la oferta.
El concurso público, que busca la revisión del diseño y la construcción de este segmento final, tuvo que ser pausado en marzo porque los requisitos del contrato presentaban errores técnicos que desfavorecían a las Uniones Temporales de empresas (UTE) frente a las que licitaban de forma individual. Tras corregir estas deficiencias, el Ministerio de Transportes ha habilitado un nuevo plazo para la presentación de ofertas, que se extendió hasta el 16 de junio.
A pesar de este desbloqueo, los tiempos estimados para la ejecución de la obra siguen siendo prolongados. La adjudicación de este contrato de más de tres millones de euros no se prevé antes de octubre de este mismo año. Además, el plazo original para la adjudicación se ha extendido de dos a cuatro meses.
La finalización de la A-21 en este último tramo ha estado lleno de retrasos y problemas
- Rediseño del Trazado: Una vez que se adjudique el contrato, la Demarcación de Carreteras estima que el rediseño del trazado requerirá un plazo máximo de 36 meses. Inicialmente, se había calculado en 24 meses, pero el plazo se amplió "por motivos de disponibilidad presupuestaria". Esto implica que el nuevo proyecto de construcción no estaría listo antes del segundo semestre de 2028.
- Retraso en el inicio de las Obras: Después de la finalización del proyecto rediseñado, la fase de licitación de las obras podría demorar más de un año adicional. Por tanto, la entrada de la maquinaria pesada para la construcción de la autovía no se produciría, en el mejor de los casos, antes de finales de 2029 o principios de 2030.
- Continuos incrementos de costes: Este tramo ha visto cómo su presupuesto se ha disparado a lo largo de los años debido a diversas revisiones. El proyecto original, redactado en 2006 y aprobado en 2008, tenía un presupuesto de 61 millones de euros. Por la crisis económica y la necesidad de optimizar las obras públicas, se ordenó su redacción desde cero en 2015, resultando en un proyecto aprobado en 2016 con un presupuesto de 87 millones de euros. Ahora el coste estimado para terminar este tramo supera ya los 120 millones de euros, es decir, el doble que cuando se inició todo.
El propio Gobierno ha reconocido que las "circunstancias de planificación económica del Ministerio han obligado a priorizar otras actuaciones y demorar la licitación de las obras" entre Puente la Reina y Fago.
Una vez finalizada la A-21, esta infraestructura estratégica en el Pirineo ofrecerá beneficios significativos. Reducirá notablemente el tiempo de trayecto para llegar a las estaciones de esquí de Astún y Candanchú, así como las de Valle de Tena..
De todas maneras el calendario para la finalización de este último tramo de la A-21 sigue siendo muy lejano, hacia 2030 como mínimo, pero el desbloqueo actual de la licitación es considerado un paso importante hacia una fecha más realista para esta largamente esperada infraestructura.

En verde, tramo de la A-21 pendiente de ejecución y que ahora se vuelve a licitar