Si eres de los que te has hecho alguna vez el Camino de Santiago, sabrás que es muy difícil escaparte de las ampollas e incluso algún dolor en las piernas. Y eso que vas con calzado adecuado y preparado para la caminata. Imagina ahora hacerte el doble de esos kilómetros, y con botas de esquí.
Pues este es el reto que Reuben Gray y Matt Brinkley, dos amigos de Londres, van a comenzar a partir del próximo viernes 13 de junio. Ese día partirán a las 12h del mediodía desde Oxford Circus, en el centro de Londres para, en unos 45 días caminando con botas de esquí recorriendo el sur de Inglaterra, desembarcar en Bélgica, pasar a Luxemburgo y Suiza para pasar a Francia y llegar a Val Thorens, la estación de esquí más alta de Europa, ya que tiene la base a 2.300 metros de altitud, lo que les hará afrontar una última rampa antes de marcar su objetivo.
Bautizado como “No Lifts, Just Legs” (“Sin telesillas, solo piernas”), este desafío está programado para que dure 45 días en los que cubrirán un total de 801 millas (1.289 km) y tiene un fuerte componente solidario. Reuben y Matt esperan recaudar 35.000 libras esterlinas (41.000 €) a través de esta web de JustGiving para dos organizaciones benéficas:
- Macmillan Cancer , que apoya a personas que luchan contra el cáncer.
- Snow Camp, una ONG que ayuda a transformar las vidas de jóvenes en situación vulnerable a través de los deportes de nieve.
La inspiración detrás del reto es profundamente personal. Reuben Gray rinde homenaje a su padrino fallecido, Jerry Chilvers, quien luchó valientemente contra el cáncer.
Más que una caminata: una experiencia compartida
El recorrido no solo servirá como campaña solidaria, sino también como lanzamiento oficial de "King of the Hill", una nueva app de planificación de viajes de aventura y esquí. La aplicación, que incluye funciones sociales, gamificación e inteligencia artificial, busca hacer que organizar salidas grupales sea fácil, divertido y colaborativo.
Durante el trayecto, el público podrá seguir cada paso de la pareja a través de un mapa GPS en tiempo real, videodiarios diarios y actualizaciones en redes sociales. Además, habrá encuentros con figuras del mundo del deporte y actividades sorpresa a lo largo del camino.
Consecuencias físicas
Un reto así comporta un nivel físico muy exigente. Las botas son rígidas, no transpiran y seguramente hasta calurosas. Según el programa, harán entre 20 y 40 kilómetros diarios. Eso puede ser tranquilamente más de cinco horas de durísima caminata.
A finales de este pasado mes de abril, Mike Humphreys, un especialista en correr maratones, se hizo los 42 kilómetros de la de París con botas de esquí. Este deportista, acostumbrado a retos de este calibre, se he hecho carreras de montaña en bañador en pleno invierno, llegó a Val Thorens desde Londres en una vieja bicicleta, y tiene cierta experiencia en prepararse para este tipo de desafíos.
Mike Humphreys explica los dolores que sufrió al acabar la maratón de París que se hizo entera con botas de esquí
Para la maratón de París estuvo corriendo y entrenando varias semanas antes con botas de esquí para acostumbrarse. Finalmente la maratón de París se la hizo en tres horas, y explicaba unos días después las llagas, ampollas y dolores que sufrió al acabar la carrera. La describió como "la carrera más dolorosa de mi vida"
"Acabo de hacer una maratón... ¡en botas de esquí! Por eso estoy así. No quiero quitarme los calcetines porque siento que se me han caído todas las uñas y tengo muchísimo dolor en los pies. Ha sido horrible."
Dolores y sensaciones que Mike Humphreys experimentó en tres horas de Maratón de París. Ahora multiplica ese tiempo por dos y después por 45 días que es lo que quiren hacer Reuben Gray y Matt Brinkley. Sin duda tienen ante sí un reto tan extraordinario como exigente que puede dejar atrás los dolores de un Camino de Santiago.
De todas maneras antes de afrontar este reto, se han ido preparando. Matt Brinkley por ejemplo corrió el pasado mes de abril una pequeña carrera de 6 kilómetros con botas de esquí.... y también los esquís a cuestas!.

Esta es la ruta programada por Reuben Gray y Matt Brinkley para ir de Londres a Val Thorens con botas de esquí